En el folclore, un hombre lobo es una persona que se transforma en lobo, ya sea a propósito o involuntariamente, a causa de una maldición o de otro agente exterior. El cronista medieval Gervase de Tilbury asoció la transformación con la aparición de la luna llena, pero este concepto fue raramente asociado con el hombre lobo hasta que la idea fue tomada por los escritores de ficción moderna. La mayoría de las referencias modernas están de acuerdo en que un hombre lobo puede ser asesinado si se le dispara una bala de plata, aunque esto es producto de la narrativa moderna y no aparece en las leyendas tradicionales. En versiones modernas, se agregó la idea que ha existido una fuerte rivalidad entre vampiros y hombres lobo, debido a que pertenecen a una misma raza de criaturas. Los licántropos, al haber renunciado a los poderes vampíricos para obtener una forma física superior, se ganaron el rencor de sus parientes.
En España es conocido el caso de Manuel Blanco Romasanta, en cuya vida se basan las películas El bosque del lobo, y Romasanta. La caza de la bestia (2004). También Hollywood ha aprovechado esta antigua leyenda para realizar cientos de películas que incluyen este personaje o que se relacionan con el tema: "El aullido", "El hombre lobo", "crepúsculo", "Van Helsing", "La maldición", entre otras.