sábado, 27 de julio de 2013

El viejo árbol

El viejo árbol es un cuento perteneciente a la colección de cuentos cortos para educar en valores de la Asociación Mundial de Educadores Infantiles (AMEI - WAECE). 

Este cuento invita a reflexionar sobre la ayuda mutua, las ventajas de la colaboración y el trabajo en equipo, la conservación de la naturaleza y en especial, el valor del agua como fuente de vida. Por su amplia temática, este cuento es un buen recurso para maestros en clase de ciencias naturales, educación ambiental, ética, entre otras asignaturas. 





sábado, 20 de julio de 2013

Amor patrio

Cuando se publicó el soneto Amor Patrio escrito por el diputado de la Provincia de Santafé, Manuel Bernardo Alvarez en el año 1.810,el editor de la publicación original exaltó que este soneto expresaba bien los sentimientos de un verdadero amante de su patria. 

Amor Patrio

Mi corazón herido y traspasado
del más vivo dolor, de un cruel tormento
fluctúa en el pecho sin hallar momento
que alivie su pesar y su cuidado.

El amor patrio dulce se ha cantado
en medio de la pena, y del lamento
por el triste poeta, en cuyo acento
sólo suena la voz de un desdichado.

 Yo te amo tiernamente, Patria mía,
tu amor me tiene lleno de amargura:
¿Cómo podrá ser dulce esta fineza?
dulce será mi muerte en aquel día
en que deje brillante tu luz pura,
en que triunfante deje tu firmeza.





lunes, 8 de julio de 2013

Doña Disparate

(María Elena Walsh)


Doña Disparate,
nariz de batata,
se olvida, se olvida
de cómo se llama.

Se olvida el rodete
detrás de la puerta,
duerme que te duerme
cuando está despierta.

Se quita el zapato,
se pone el tranvía,
bebe la botella 
cuando está vacía.

No sabe, no sabe 
y aprieta el botón
para que haya luna
o se apague el sol.

Oye con el diente,
habla con la oreja,
con un cucharón
barre la vereda.

–¡Señor boticario,
véndame tornillos!
¡Señor verdulero,
hágame un vestido!

”¡Guau!”, dice el felpudo.
”¡Miua”, dice la jarra.
¡Que yo soy el perro!
¡Que yo soy la gata!

Doña Disparate,
nariz de merengue,
se ”ecovica” digo,
se equivoca siempre.

martes, 2 de julio de 2013

El Patas o Mandingas

Con el nombre de Patas, el Putas o Mandingas es conocido en varias regiones colombianas al diablo u otros seres que personifican desgracias, ruinas, horror y fuerzas malignas. 

Cuentan los campesinos de la región, que el Patas quiere llevarse las almas de la humanidad y sólo será derrotado por las fuerzas del bien. Para lograr su cometido, el Patas utiliza todo tipo de estrategias para seducir y arrastrar a los hombres a la muerte. 

El Patas es negro, horrible, con cachos y cola en punta de lanza; exhalan fuego por la boca y llevan siempre un tridente ardiente en su mano. Así lo imaginan los habitantes de los pueblos, porque al final, todos coinciden en que ninguno lo ha visto, pero evitan invocarle para no tener que encontrárselo alguna vez. Solo se atreven a mencionarlo, cuando quieren asustar a los niños, para maldecir a alguien o salir de un apuro. Expresiones como "de esta no lo salva ni el Putas" o "se lo va a llevar el Patas" son comunes dentro de las regiones de Colombia, en especial en la zona Andina. 

En otros países de Latinoamérica también se conoce este personaje.  En Chile hay historias sobre mineros y arrieros que fueron intimidados y atacados por Mandingas, al igual que en Argentina y otros países del sur del continente.